Santa María, Madre Nuestra que en cada misterio del santo rosario nos brindas al Salvador.
Acudimos a ti necesitados, nos alegramos que desde la cruz el Señor te haya encomendado la misión de acercarnos a el y a su iglesia por la conversión y la penitencia.
Alentado por la confianza que nos inspiras ponemos en tus manos maternales nuestras preocupaciones y temores.
Pero, deseamos imitar tu fidelidad a Dios aceptando con amor y humildad todas las pruebas.
Madre Nuestra del Rosario que tu presencia renueve nuestra vida, alivie nuestro ser agobiado por sufrimiento y la enfermedad, sostenga nuestra docilidad a la gracia y fortalezca nuestro amor a los demás, convirtiéndonos así en testigos del amor del Padre que no vaciló, por tu intermedio, en darnos a Jesús
Amén.

0 $type={blogger}