%207.46.06%20a.%20m..png)
Señor mío, te alabo al iniciar este sábado, porque siempre tienes piedad de mí y me bendices.
Vengo con fe delante de ti en este nuevo día a agradecerte por tu compañía constante, por tu amor.
Me alegro en este día y me gozo de tu presencia porque me has dado fe para confiar en tu ayuda, en tus obras magníficas, esas que siempre realizas de forma oportuna.
Te ofrezco todo mi corazón, te entrego en él todas mis emociones y sentimientos.
Deseo estar sereno, tranquilo, responder sabiamente a cada situación adversa, porque con el desespero no logro nada.
Con tu fuerza venceré mis miedos, te amo y aunque a veces fallo, busco amarte y agradarte.
Quiero pedirte que sigas llenándome de tu fuerza para poder luchar con ánimo, con perseverancia, sabiéndome acompañado por ti.
Regálame la gracia de vencer mis limitaciones, mis dificultades.
Eres mi Dios y protector, por eso creo plenamente que nunca nos abandonas.
Glorifícate y muéstrate grande en todas las acciones que realizo para no dejarme vencer por los problemas.
Nadie hay como tú que actúe siempre cuando lo necesito.
Gracias por levantarme de mis tristezas y hacerme una persona feliz y tranquila que tiene puesta su fe en ti.
Amén
0 $type={blogger}