Señor, me despierto en este nuevo día dándote gracias porque me das la oportunidad de seguir luchando.

Sólo quiero alabarte y bendecirte por siempre, entregarte mi vida para hacer tu voluntad todos los días, soy consciente de que sólo así alcanzaré la vida eterna.

Acepto tu propuesta de vida porque me muestras el camino para ser feliz, por eso te busco con un corazón que anhela estar en tu presencia.

Gracias porque me das tu luz para seguir tu camino y continuar agarrado de tu mano.

Hazme fuerte, dame lo que necesito para ser feliz, la sabiduría y el espíritu de luchador, de esos que luchan y no se cansan porque encuentran fuerzas en la fe de Cristo Jesús.

Gracias, mi Padre de bondad, infinitas gracias por esta oración, por este momento de encuentro contigo, por tu presencia que me rodea y me recuerda que nunca estaré solo, porque siempre estás conmigo.

Te alabo porque no dejas de mostrarme cuánto me amas y todo lo que haces y puedes seguir haciendo en mi corazón.

Haz que en este día descubra que me has dotado de todo lo que necesito, para hacerle frente a las dificultades que me han robado la tranquilidad.

Dame un corazón renovado con el fuego de tu Espíritu, dame tu gracia en este día.

Todo saldrá bien en tu nombre, por eso con alegría y decisión salgo a luchar. Gracias por tu compañía en este nuevo día.

Amén