Gracias por tu compañía, por tu aliento, por tus palabras, por todo.
En este momento me abandonó confiadamente en tus brazos, quiero pasar la página del día vivido y sentir que todo mi ser descansa en tu presencia.
Confío en ti en esta noche y en cada momento de vida que en tu bondad me regalas.
Tú que estás vivo y me amas recibe cada buena acción del día de mañana como tributo a todo lo que haces por mí, sé que no me pides nada a cambio sólo que viva en el amor.
Gracias porque me has bendecido con personas que me expresan su cariño y me brindan su compañía, gracias porque a través de esas personas siento tu protección y ayuda.
Dame la capacidad para ser libre ante las relaciones que me hacen daño y me quitan la alegría que Tú me regalas.
Ven y dame la capacidad de aprender de mis equivocaciones, para tomar distancia de lo que no me permite avanzar con seguridad.
Gracias porque en este momento sé que me estás llenando de tu fuerza para que mañana esté listo para salir adelante.
Amén
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