Espíritu Santo, toma posesión de mí, entra en lo más profundo de mi ser, que éste sea un día para seguir describiendo la grandeza de tu amor, lo grande que eres, porque tu misericordia no tiene límites.
Gracias por escuchar siempre las súplicas de los que diariamente te buscamos y confiamos en ti.
Señor, hoy busco tu rostro, hoy vengo a decirte que necesito tu presencia en mi vida, te pido que intervengas en mi historia, en esta mañana estoy dispuesto a transformar mi realidad y dirigirla hacia ti.
Te pido que estés siempre conmigo guiándome en cada paso, sosteniendo mi vida, que cuando lleguen los golpes yo pueda resistirlos.
Contigo a mi lado no tengo porque temer, tú eres todo amor y tu palabra dice que tu amor echa fuera todo temor.
Yo confío en tu Palabra y sé que tú no permites cargas que no pueda soportar, todo lo puedo en ti, me das las fuerzas, por eso no me amilano ante las barreras, sino que agarrado de ti, me siento fuerte para superarlas.
Necesito de ti, necesito de tu bendición, te entrego las acciones de este día que ya ha iniciado, para que estén impregnadas de tu amor, que ellas reflejen la misericordia que has tenido conmigo, para que todos sepan que eres grande y majestuoso.
Tú eres mi roca, el castillo donde me resguardo, por eso te alabo, te bendigo, y glorifico tu nombre maravilloso, bendito sea tu santo nombre por siempre.
Amén

0 $type={blogger}