Señor, gracias por este nuevo día que me das y por las posibilidades que tengo para seguir construyendo mis planes y mis proyectos. 

Que mi día esté siempre guiado por tu santo espíritu, que tu soplo de vida me anime desde dentro y me haga encontrar sentido a los acontecimientos de la historia, especialmente aquellos que son difíciles de entender y aceptar. 

Te pido que me ayudes aceptar lo que no es fácil de aceptar, aquellas cosas que tal vez quisiera que no hubieran sucedido pero que ahí están, formando parte de mi vida.

Dios de amor, confórtame, lléname el corazón de esperanza, de fe, de amor, que pueda descubrir las maravillas que haces en mí cuando abro el corazón a tu acción. 

Sana mis recuerdos, sana mi corazón, hazme libre, porque quiero sólo tener vida para amarte y para amar a los míos. 

Sé, tú, mi Señor, quien en este momento me des la salud que necesito para seguir adelante.

Que la fuerza de tu amor me haga sentir sano de todas esas situaciones de dolor que he vivido y me afectan mucho. 

Te confío todo lo que soy y todo lo que tengo para que abras caminos de bendición y me permitas alcanzar los objetivos que me he propuesto. 

Confío en tu amor y en tu misericordia. 

Dame libertad para dejar ir, dame sanidad de mis recuerdos, dame fuerza para alejar de mí los lazos que no me convienen. 

Amén